La Unión Europea ha invertido 3,6 millones de euros en una campaña que se base en decirle a los consumidores que no deben tener «una idea estereotipada sobre las carnes rojas».
La campaña, que lleva por lema “Orgullosos de la carne de la UE” ha sido criticada en España por el uso de la imagen de la mujer como reclamo, además de por asociar los productos cárnicos con una dieta saludable.
Potenciar el consumo de carne a cualquier precio
El presupuesto se ha destinado a dos organizaciones del sector APAQ-W en Bélgica y Provacuno en España. Esta campaña y sus fondos, fueron aprobados en 2019, ha entrado en vigor en 2020 y se prolongará hasta 2022 con otras iniciativas que, según la UE van dirigidas a los consumidores, a los periodistas y a los comercios, aunque en este caso, la campaña interpelaba directamente al consumidor: «Conoce los beneficios de comer carne», «la proteína cárnica como componente esencial en una dieta variada y equilibrada».
Lluvia de críticas al lobby cárnico
Las críticas por parte de expertos en alimentación y ecologistas han sido inmediatas, ya que con este presupuesto (4,5 millones de euros de los que Bruselas financia el 80%) se financia un producto cárnico que no es saludable en grandes cantidades y que deja, además una huella en el medioambiente.
Varios nutricionistas ya han salido en contra de esta campaña En este caso, la campaña interpelaba directamente al consumidor: «Conoce los beneficios de comer carne», «la proteína cárnica como componente esencial en una dieta variada y equilibrada». De hecho, en España se consume hasta diez veces la cantidad de carne roja según las recomendaciones sanitarias recogidas en el informe de Justicia Alimentaria, que, además, alerta de que una alimentación basada en este tipo de productos incrementa en un 50% los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares.
Contaminación de la producción intensiva ganadera
La producción intensiva ganadera ha incrementado su contaminación atmosférica un 27% en los últimos diez años, según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica. De hecho, la producción vacuna es la segunda que más emisiones genera, siendo la responsable del 20% del total atribuido a la ganadería española, según las estadísticas de Greenpeace, por debajo de la industria porcina.
Fuente: Público
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