Los más pequeños de casa son sin duda uno de los grupos más vulnerables a la mala alimentación. A diario, tienen a su alcance multitud de productos insanos que las marcas nos venden como saludables, pero lo cierto es que están llenos de azúcares, harinas refinadas o grasas de mala calidad. Tanto en supermercados como en anuncios de la televisión es fácil ver multitud de ejemplos que demuestran que hay todo un mercado enfocado a que niños y niñas pidan determinados productos que no son los más adecuados para tener una alimentación sana y saludable.

Seis consejos para conseguir una alimentación sana desde la infancia

En medio de todos estos condicionantes, ¿cómo conseguir que los peques de la casa tomen verduras? ¿Cómo incorporar más vegetales, fruta y legumbres a su alimentación? Sin duda, estas son preguntas muy recurrentes y que prácticamente todos los que tengan hijos se habrán hecho. Hay madres, sobre todo, y también padres, que acuden a mí y a otras profesionales de la cocina o la nutrición y que plantean estas preguntas. Probablemente ni yo ni el resto tengamos la respuesta o la solución genérica a este enigma, ya que cada niño o niña, así como su entorno y las circunstancias del mismo, son únicos. Sin embargo, hay varios puntos que sí pueden ayudarnos a fomentar una dieta saludable y variada en los más pequeños, en la que se encuentren por ejemplo las verduras, y a crear buenos hábitos que puedan perdurar en el tiempo:

  1. Respetar el gusto de nuestros hijos e hijas. Este es un punto muy importante. Muchas veces nos empeñamos en que los más pequeños coman ensalada (por poner solo un ejemplo) con muy poca edad. Habrá quien lo haga y habrá quien no, pero quizá ofrecerles verduras y platos que les gusten sea más acertado. Por ejemplo, mi hijo mayor toma muy bien el brócoli pero ni se acerca a una ensalada, de modo que para fomentar el hábito de comer saludable y relacionarlo con algo positivo es preferible que tome brócoli a gusto que no una hoja de lechuga de mala gana.
  2. Creatividad en la cocina. Yo me crie en los años ochenta, cuando estaban de moda las espinacas de Popeye, y por eso en muchas casas se ponía un plato de espinacas recocidas como primero o de acompañamiento, y sinceramente… ¡no tenían buena pinta! Y casi estoy segura de que los adultos de la casa, que tanto se empeñaban en que las comiéramos los más pequeños, no las comían. ¿Y por qué no cambiar ese plato de aspecto y sabor poco apetecible por un falafel de espinacas, un guiso de garbanzos y espinacas o unas espinacas gratinadas? El primer contacto que tenemos con la comida es el visual, así que un poco de creatividad a la hora de elegir la receta y presentarla puede ser de gran ayuda.
  3. ¡Ser ejemplo! Si queremos inculcar hábitos alimenticios saludables a los más pequeños, es importantísimo que en familia se coma saludable, que nuestras hijas e hijos tomen los mismos platos que nosotros, que comamos juntos y de igual a igual. Esta es una forma de comunicación y de pertenecer a tu comunidad más cercana, y los peques, sin duda, van a agradecer que no se les trate de forma diferente en este ámbito tan importante.
  4. Participación. Otro punto clave. Te aseguro que si nuestros hijos e hijas participan en la elaboración de los platos que cocinamos, van a aumentar exponencialmente las posibilidades de que después los prueben. Ser partícipes y ayudar en el proceso despertará su curiosidad y aumentará el interés por probar el resultado final. Lógicamente, si les gusta o no es otra cuestión, pero si preparáis juntos la comida o la cena, además de que aprenderán a cocinar (y ese es otro punto importantísimo), querrán probar su creación.
  5. El entorno. Es otro aspecto importante. Si nosotros ponemos todo nuestro empeño en ofrecer una educación alimentaria saludable, pero parte de la familia o de nuestro círculo más cercano les ofrece a nuestros hijos e hijas opciones menos saludables, también se nos hará más difícil asentar el hábito. Por eso es imprescindible hablar con esas personas cercanas y explicarles que es más saludable que les ofrezcan unas fresas en lugar de un caramelo, por ejemplo. Aquí es muy importante contar con la colaboración del entorno más cercano y asegurarnos que entiendan y respeten nuestra decisión de crear unos hábitos de alimentación saludables desde el principio.
  6. ¡Relax! Cuando nos planteamos que nuestros hijos e hijas lleven un tipo de alimentación sano y saludable, en el que predomine el consumo de vegetales, frutas y legumbres, y dejando a un lado alimentos insanos y procesados, debemos tener algo muy claro: son niños y niñas, y no podemos pretender una alimentación sin excepciones o que sea perfecta. De hecho, considero las excepciones muy saludables: tomar un trozo de tarta en fin de semana, ir a comer todos juntos una hamburguesa o tomar un puñadito de chucherías para celebrar un cumpleaños también forma parte de una alimentación respetuosa (hablamos de opciones veganas, claro). De todas formas, no hay reglas universales, cada familia es un mundo con una naturaleza totalmente diferente a otra, por eso, cuando hay un problema real con la comida, lo ideal es acudir a un profesional de la nutrición especializado en nutrición infantil, quien nos va a tranquilizar y también a aconsejar de la mejor forma posible sobre el tema.

Estos son algunos consejos para conseguir que nuestras hijas e hijos lleven una alimentación vegetal, casera y saludable que, en definitiva, es lo mejor para el cuerpo y para el alma.

Ser partícipes y ayudar en el proceso despertará su curiosidad y aumentará el interés por probar el resultado final

Libro ‘Recetas veganas para peques ¡y no tan peques!’

Recetas veganas para peques ¡y no tan peques!

Durante los primeros años de vida se asientan los hábitos relacionados con la alimentación, que nos acompañarán toda la vida. Es por ello que cuidar la alimentación en esta primera etapa es fundamental. En este libro encontrarás recetas para incorporar más frutas, verduras y legumbres a la alimentación de tus hijos, y aprenderás a hacerlo de una forma fácil y original, porque comer, además de saludable, también debe ser divertido. Las fotos de las recetas llevan ilustraciones de The Wild Rocks. Además, cuenta con la colaboración de los colaboradores de Bueno y Vegano Iván Iglesias y Estela Nieto, de Nutrición Esencial, y de la nutricionista Natalia Albino, que comenta todas las recetas.

Autora: Patricia Menéndez (Patri medio limón), creadora del Blog Medio Limón | www.mediolimon.org

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Bueno y Vegano Marzo 2020