Muchas personas se hacen veganas durante la adolescencia. Aunque algunos padres piensan que esto es solo “una fase”, en no pocos adolescentes esta fase se alarga para siempre.
Si tu hijo o tu hija te dicen que quieren ser veganos, intenta escucharlos con la mente abierta. Es importante que te cuenten sus razones, aunque no tienes por qué entenderlas ni estar de acuerdo con todas ellas. A día de hoy el veganismo ya no es un fenómeno propio de ambientes alternativos, ni está asociado a los trastornos de conducta alimentaria. El veganismo es practicado cada vez por más personas de todas las edades, profesiones y formas de vida. Las principales asociaciones médicas y de nutrición de todo el mundo aceptan que una dieta vegana adecuadamente planificada es saludable también en la infancia y adolescencia y puede ayudar a prevenir algunas de las enfermedades que aquejan a nuestra sociedad actual.
El hecho de que un miembro de la familia sea vegano no solo no va a dificultar la vida familiar sino que puede servir para mejorar la alimentación de toda la familia
Lo que más preocupa a todos los padres y madres es la salud de sus hijos, así como su crecimiento y desarrollo. Secundariamente también se consideran las dificultades familiares y sociales que la decisión de hacerse vegano puede acarrear. Sin embargo si se hace bien, el hecho de que un miembro de la familia sea vegano no solo no va a dificultar la vida familiar sino que puede servir para mejorar la alimentación de toda la familia y para hacer la dieta de todos más variada, divertida y creativa. Socialmente cada vez es más sencillo encontrar opciones veganas fuera de casa, incluso en los establecimientos que frecuentan los adolescentes.
De acuerdo con las recomendaciones oficiales actuales la dieta de los españoles incluye demasiada carne, embutidos, productos lácteos, azúcar y cereales refinados, mientras que contiene pocas frutas y verduras y muy pocas legumbres y frutos secos. Veganizar la dieta de toda la familia, es decir, incluir más frutas y verduras y más legumbres como plato principal en vez de carne, solo puede tener consecuencias positivas.
Es conveniente leer sobre alimentación vegana y entender cuáles son las necesidades nutricionales específicas de los adolescentes
Muchos adolescentes que se hacen veganos buscan de forma espontánea, información sobre alimentación vegana, sobre todo en internet, y debemos animarlos a ello, siempre tras comprobar que la información a la que acceden sea fiable. También debemos animarlos a que se responsabilicen de planificar sus menús y preparar sus comidas, al menos desayuno y merienda. Vale la pena dedicar un tiempo todos juntos a seleccionar algunas recetas que sean fáciles de preparar y que se adapten a los gustos de la familia; y animar a nuestros hijos a cocinar para todos al menos de vez en cuando.
Hay muchos platos que pueden hacerse veganos simplemente reemplazando uno o dos ingredientes por otros. Además actualmente hay una muy buena oferta de sustitutos de la carne en forma de hamburguesas, salchichas, albóndigas y embutidos elaborados a partir de soja, tofu, seitán o legumbres, que pueden ser de mucha ayuda, sobre todo al principio.
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Además de estas alternativas vegetales, otros alimentos que facilitan mucho la transición al veganismo y merece la pena tener en casa son el hummus (lo podemos hacer o comprar ya preparado), el tofu ahumado o aderezado de alguna otra forma (listo para comer), la mantequilla de cacahuetes y los frutos secos en general. Las leches vegetales enriquecidas con calcio, especialmente la de soja, se encuentran ya en cualquier supermercado y es buena idea tenerlas siempre en casa.
Autora: Miriam Martínez Biarge, Médico Pediatra en España y Reino Unido
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